La serie EOS-1 de Canon ha sido la herramienta de trabajo de confianza de los fotógrafos de deportes profesionales durante décadas. La EOS-1D X Mark III de Canon supuso la cúspide del desarrollo de las cámaras réflex, con una velocidad de disparos en serie ultrarrápida (el doble de rápida que la EOS-1D original), un sistema de enfoque automático inteligente con seguimiento del sujeto y de los ojos, y un diseño resistente concebido para funcionar en las condiciones más extremas.
Sin embargo, ahora hay una nueva insignia en la serie EOS-1: la cámara mirrorless EOS R1 de Canon, que está planteando un verdadero dilema a algunos profesionales. Por un lado, la EOS R1 es la mejor cámara de Canon para la fotografía de deportes y está equipada con tecnología de vanguardia diseñada para facilitar el trabajo de los fotógrafos profesionales. Por otro lado, la EOS-1D X Mark III sigue siendo la mejor cámara réflex de Canon para fotografía de deportes: probada, fiable y capaz de ofrecer imágenes y vídeos a gran velocidad desde la línea de banda.
Entonces, ¿cómo se comparan estas cámaras de primera categoría para fotografía de deportes? A continuación, comparamos la EOS R1 y la EOS-1D X Mark III característica por característica, con las opiniones de Richard Heathcote, de Getty Images, y Mike Burnhill, de Canon Europe.
¿Cuál es la mejor cámara Canon para fotografía de deportes: la EOS R1 o la EOS-1D X Mark III?
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: velocidad
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: enfoque automático
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: ergonomía y manejo
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: visor electrónico frente a visor óptico
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: conectividad y flujo de trabajo
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: calidad de construcción y fiabilidad
- EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: gama de objetivos
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: velocidad
Tanto la EOS R1 como la EOS-1D X Mark III de Canon están diseñadas para captar imágenes a velocidades vertiginosas y mantener ese ritmo durante largos periodos de tiempo. La EOS-1D X Mark III puede disparar a una velocidad de hasta 16 fps con el visor óptico y de hasta 20 fps en el modo Visión en directo.
La EOS R1 alcanza un máximo de 12 fps cuando se configura en el modo Obturador mecánico o electrónico a la 1.ª cortinilla. No obstante, supera con creces a las cámaras réflex cuando se utiliza el obturador electrónico, ya que permite disparar de forma continua y silenciosa a una velocidad de hasta 40 fps. La velocidad de disparos en serie más alta de la EOS R1 se puede asignar a uno de sus botones personalizables, lo que te permite captar el momento decisivo incluso cuando la cámara está configurada en un modo de disparo más lento.
No todos los deportes requieren 40 fps para captar el momento decisivo. Por suerte, la EOS R1 tiene una velocidad de disparos en serie personalizable que va desde 40 fps hasta 1 fps. «Mi configuración diaria es de 20 fps, pero si estoy tomando fotos para una presentación u otro trabajo con flash, la reduzco a 8 o 10 fotogramas por segundo para dar tiempo al flash», explica Richard Heathcote, fotógrafo de deportes jefe de Getty Images. «Cuando utilizo mi objetivo de 70-200 mm para captar las celebraciones en la portería de fútbol, lo configuro a 40 fps. Así no se pierde nada».
Otra ventaja del obturador electrónico de la EOS R1 es que permite velocidades de obturación de hasta 1/64 000 s. Con el obturador mecánico o electrónico a la 1.ª cortinilla, la EOS R1 ofrece hasta 1/8000 s, igual que la EOS-1D X Mark III.
Los disparos en serie previos son otra ventaja de la cámara mirrorless. Con la cámara configurada en el modo de disparos en serie y el AF activado, puedes habilitar esta función pulsando el botón de disparo hasta la mitad; entonces, la EOS R1 comenzará a almacenar en búfer las imágenes de forma continua. Al pulsar el botón por completo, la cámara no solo comienza a disparar, sino que también guarda un número preestablecido de fotogramas (que el usuario puede configurar de 1 a 20) en el búfer en ese momento. A 40 fps, esto supone hasta medio segundo de imágenes, y a 10 fps pueden ser 2 segundos completos, lo que te permite volver atrás en el tiempo para captar el momento decisivo, incluso si tu reacción se ha retrasado una fracción de segundo.
Richard Heathcote considera que esta función es especialmente útil para fotografiar goles de fútbol. «La mayoría de las veces hay varios jugadores cruzándose delante de ti», explica. «Puede que no obstaculicen al goleador, pero sí al balón. Para mí, una imagen de un gol necesita tanto al jugador que lo marca como al balón». Si falta alguno de los dos en la primera imagen, los fotogramas adicionales de los disparos en serie previos pueden marcar la diferencia. «Es otra tecnología que te ayuda a hacer tu trabajo y te facilita la vida», añade.
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EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: enfoque automático
Ambas cámaras cuentan con el sistema de enfoque automático inteligente de Canon, basado en IA de aprendizaje profundo, que puede detectar y seguir la cabeza de una persona, ya sea un esquiador con gafas o un piloto en un coche de Fórmula 1.
Sin embargo, gracias al mayor ancho de banda de datos y a la comunicación más rápida entre la cámara y el objetivo que permite la arquitectura de la montura RF de Canon, la EOS R1 ha mejorado el rendimiento del AF, que resulta eficaz en condiciones de baja iluminación de hasta EV -7,5, frente a EV -4 en la EOS-1D X Mark III. El nuevo procesador DIGIC Accelerator de la EOS R1, en combinación con el procesador de imágenes DIGIC X, permite nuevas funciones, como AF Action Priority, que fija el enfoque en movimientos específicos de determinados deportes. Además, la EOS R1 cuenta con funciones avanzadas, como el AF con control de ojos, que permite establecer o mover el punto AF al detectar qué se está mirando a través del visor. La montura RF también permite Dual Power AF en objetivos compatibles, lo que ofrece un enfoque automático aún más rápido al utilizar superteleobjetivos, como el RF 400mm F2.8L IS USM y el RF 600mm F4L IS USM.
«Con la EOS R1, los profesionales de la fotografía de deportes confían aún más en el AF», señala Mike. «Esto les permite ampliar sus límites y probar cosas nuevas, ya que no tienen que preocuparse por el enfoque y pueden concentrarse por completo en la creatividad. Por ejemplo, los fotógrafos de Fórmula 1 ahora pueden seleccionar y fijar el casco de un piloto casi al instante, por lo que pueden pensar en diferentes ángulos y en la narrativa. Puedes encuadrar la escena y esperar a que el coche complete la composición, mientras que antes tenías que seguir al coche y esperar a conseguir la toma. Ahora es más fácil dar vida a las ideas creativas al instante».
La EOS R1 incorpora AF tipo cruz, lo que significa que el sensor completo detecta la diferencia de fase no solo horizontalmente, como otros sistemas de enfoque automático, sino también verticalmente al mismo tiempo. Esta mayor sensibilidad se traduce en un enfoque más preciso y rápido en situaciones con baja iluminación y bajo contraste, un enfoque automático mejorado en situaciones visualmente difíciles, como disparar a través de la red, y un AF más estable en el modo de disparos en serie. En comparación, la EOS-1D X Mark III solo tiene cuatro puntos AF tipo cruz, y el número de puntos activos depende del objetivo utilizado.
Las amplias posibilidades de personalización de la cámara EOS R1 te permiten configurarla exactamente a tu gusto y cambiarla fácilmente según las necesidades de cada sesión. Los controles personalizados son independientes para vídeo, fotos y reproducción, y los puedes guardar en una tarjeta de memoria para volverlos a cargar rápidamente.
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: ergonomía y manejo
La EOS R1 de Canon supone una revolución en rendimiento para los fotógrafos de deportes y una evolución de la EOS-1D X Mark III en cuanto al manejo. Ofrece una experiencia de disparo perfecta para los profesionales que han desarrollado la memoria muscular con la disposición de los controles de la EOS-1D X a lo largo de los años.
«El legado de la EOS R1 se remonta a 1987», afirma Mike. «Algunos de los botones principales no han cambiado mucho desde sus inicios. Los hemos movido ligeramente para que resulten más ergonómicos, pero te resultarán muy familiares si has utilizado alguna vez una cámara de la serie 1».
La ergonomía puede pasar desapercibida entre las espectaculares especificaciones técnicas de una cámara, pero, si eres un fotógrafo de deportes profesional que mantiene la cámara frente al ojo durante largos periodos de tiempo, la sensación que te transmite al utilizarla es posiblemente lo más importante. La EOS R1 es el resultado de 40 años perfeccionando la fórmula. Como señala Richard, «cuando la sostienes, notas que la cámara está perfectamente diseñada: los botones están donde deben, los dedos se mueven con comodidad al pulsarlos y la empuñadura no es tan gruesa que tengas que abrir demasiado la mano».
Además, los controles de la EOS R1 se pueden configurar más que los de cualquier otra cámara EOS anterior, lo que permite adaptarlos fácilmente a tu estilo de disparo o a las distintas situaciones en las que trabajes.
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: visor electrónico frente a visor óptico
Una de las diferencias clave entre la EOS R1 y la EOS-1D X Mark III de Canon se hace evidente al mirar a través de sus visores. Los fotógrafos de deportes suelen preferir los visores ópticos porque ofrecen una vista en tiempo real sin demora. Un visor óptico muestra la escena tal y como es, lo que resulta útil para tomas que requieren precisión temporal, como captar el momento en que una pelota de tenis entra en contacto con una raqueta.
Sin embargo, el visor electrónico de alta resolución de la EOS R1 es único en su clase. Con una frecuencia de actualización fluida de hasta 120 fps, disparos en serie previos y ampliación ajustable, ofrece una experiencia visual que supera incluso a los mejores sistemas ópticos. A diferencia de un visor óptico, el visor electrónico muestra la imagen tal y como la ve la cámara, lo que permite controlar los ajustes de exposición, balance de blancos y color en tiempo real, así como ver con claridad en condiciones de oscuridad en las que el ojo humano tendría dificultades. También puedes revisar y clasificar las imágenes, navegar por los menús y cambiar los ajustes sin apartar la vista del visor.
Hay varios aspectos importantes que tener en cuenta con respecto al visor electrónico, como explica Richard. «La frecuencia de actualización es realmente importante en lo que respecta al cansancio ocular», afirma. «Pasas tanto tiempo mirando a través de la cámara que no quieres cansarte. Canon ha acertado con la EOS R3 en este sentido y aún lo ha mejorado más en la EOS R1. Es el visor electrónico que más se parece a un visor óptico. Además, el tamaño físico del visor electrónico es simplemente increíble, ya que es tres veces más grande que el de algunos modelos del mercado».
Tanto la EOS-1D X Mark III como la EOS R1 (en la imagen) ofrecen opciones de conexión completas, aunque la cámara mirrorless cuenta con estándares más rápidos, fiables y actualizados, como Wi-Fi 6E (802.11ax) de 6 GHz y Bluetooth 5.3, en comparación con Wi-Fi 4 (802.11n) y Bluetooth 4.2 en el modelo réflex.
Al igual que la EOS-1D X Mark III, la EOS R1 te permite añadir rápidamente grabaciones de voz a las imágenes antes de enviarlas. También puedes hacerlo desde el smartphone a través de la aplicación Content Transfer Professional (CTP) de Canon.
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: conectividad y flujo de trabajo
Las mejores cámaras para fotógrafos de deportes deben ser tan ágiles a la hora de distribuir las imágenes como lo son a la hora de tomarlas. Tanto la EOS-1D X Mark III como la EOS R1 están diseñadas para la transmisión de archivos a alta velocidad, pero la EOS R1 se ha concebido teniendo en cuenta los flujos de trabajo modernos. Ofrece una conectividad más rápida que incluye Wi-Fi 6E (en las regiones donde está disponible) y Ethernet 2,5 G BASE-T. La carga por USB resulta muy cómoda, al igual que la capacidad de captar imágenes y vídeo a la vez.
Otra función que ahorra tiempo en el flujo de trabajo de la EOS R1 con respecto a la EOS-1D X Mark III es la capacidad de ampliar y recortar imágenes en la propia cámara mediante una función basada en IA que detecta los ajustes y el objetivo que se están utilizando, de modo que se conservan el bokeh y la profundidad de campo. «Puedes tomar un archivo y multiplicar su tamaño por cuatro», explica Richard con entusiasmo, «y la calidad de imagen es absolutamente fantástica».
Puede que no tengas tiempo de acoplar un multiplicador de 1,4x para hacer un primer plano del entrenador en la banda o de un gol desde el extremo opuesto del campo, pero siempre puedes recortar la imagen y proporcionar a tus editores un archivo de mayor tamaño con el que trabajar. Y, desde luego, no hay tiempo para sacar la tarjeta, insertarla en un portátil y mejorar la imagen con un programa, como apunta Richard: «En nuestro sector, la velocidad es lo más importante. Por eso, poder mejorar un archivo en cuestión de segundos y enviarlo directamente a los editores es fenomenal».
«Estamos muy centrados en la durabilidad de la EOS R1», afirma Mike. «Al ser una cámara de la serie EOS-1, la EOS R1 hereda todo el sellado y el rendimiento probado en condiciones de altas y bajas temperaturas de la EOS-1D X Mark III. Incluso el visor dispone de un sistema antiempañamiento [como se muestra aquí], que resulta muy útil al respirar cerca de la cámara o cuando llueve. Todos estos pequeños detalles, cuidadosamente diseñados, hacen que esta cámara sea ideal para los deportes».
Se emplean modelos y simulaciones informáticos de última generación para perfeccionar la solidez de las nuevas cámaras de la serie EOS 1. Tanto la EOS R1 como la EOS-1D X Mark III se sometieron a exhaustivas pruebas, incluidas pruebas de impacto y de exposición a altas y bajas temperaturas, para garantizar que sean herramientas en las que los profesionales puedan confiar.
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: calidad de construcción y fiabilidad
Al igual que las cámaras de la serie EOS-1 de Canon, las EOS R1 y EOS-1D X Mark III están diseñadas para soportar un uso profesional diario muy exigente. El mayor peso de la EOS-1D X Mark III (1440 g con tarjeta y batería) podría sugerir una mayor robustez que la EOS R1, que pesa 1115 g. Sin embargo, la EOS R1 mirrorless carece de caja de espejo y pentaprisma, y su calidad de construcción mantiene el legado de fiabilidad y durabilidad de la serie EOS-1.
Por ejemplo, Richard afirma que nunca ha tenido ningún problema al fotografiar deportes de invierno a temperaturas bajo cero con sus cámaras Canon. Una sesión de esquí en los Juegos Olímpicos de Invierno puede durar un par de horas, pero hay que estar allí 4 o 5 horas antes, explica, «así que pasas mucho tiempo de pie en condiciones de mucho frío. Las pruebas de salto de esquí y bobsleigh se celebran normalmente de noche, en pistas en las que la temperatura puede bajar fácilmente hasta los -15 °C. Tu objetivo principal es mantener el cuerpo en movimiento y caliente, por no hablar de intentar hacer fotos».
Ninguna de las dos cámaras está homologada para funcionar a temperaturas bajo cero, pero tanto la EOS-1D X Mark III como la EOS R1 son famosas por su rendimiento en condiciones extremas, con controles que se pueden manejar fácilmente con guantes.
Gracias al diseño mirrorless del sistema EOS R, los diseñadores de objetivos tienen más libertad que nunca para innovar. Algunos objetivos RF igualan el rendimiento de sus homólogos de la gama EF, pero con un diseño más ligero y compacto. Otros incorporan capacidades y diseños totalmente nuevos, como el objetivo híbrido RF 70-200mm F2.8L IS USM Z que, en palabras de Richard, es «posiblemente el mejor zoom jamás fabricado» y que aquí se utiliza con un adaptador de zoom motorizado de Canon.
La montura RF de Canon tiene más contactos que la montura EF, por lo que los objetivos RF se comunican con la cámara más rápido y con mayor ancho de banda. Esto no solo permite un enfoque automático más rápido, sino que también ofrece una mayor personalización gracias al anillo de control y a los botones de función del objetivo, además de correcciones del objetivo en tiempo real sin que se reduzca el rendimiento fotográfico.
EOS R1 frente a EOS-1D X Mark III de Canon: gama de objetivos
La gama de objetivos RF se ha ampliado rápidamente y ahora abarca longitudes focales desde un ultra gran angular de 3,9 mm (si se incluyen los innovadores objetivos estereoscópicos Dual Fisheye) hasta un superteleobjetivo de 1200 mm. La gama combina tecnologías de vanguardia con un rendimiento óptico líder en su clase e incluye opciones únicas como objetivos VR para crear contenido envolvente, diseños híbridos, como el RF 70-200mm F2.8L IS USM Z de Canon, optimizado tanto para vídeo como para fotografía, y zooms ligeros y de primera calidad como el RF 100-300mm F2.8L IS USM de Canon.
Para los fotógrafos de deportes profesionales que buscan mayor velocidad, control y portabilidad, una EOS R1 de Canon combinada con los últimos objetivos RF de Canon ofrece interesantes posibilidades. En concreto, los objetivos RF de la serie L ofrecen una calidad de imagen excepcional y permiten que el sistema de enfoque automático funcione con el máximo rendimiento. Muchos son más compactos que sus equivalentes EF y cuentan con características prácticas, como un anillo de control personalizable, un botón de función del objetivo y una respiración de enfoque mínima, lo que supone un beneficio para quienes trabajan tanto en fotografía como en vídeo.
Los objetivos EF son totalmente compatibles con las cámaras del sistema EOS R mediante los adaptadores de objetivo EF-EOS R, por lo que resulta sencillo seguir utilizando los objetivos antiguos mientras se descubren las ventajas del vidrio RF nativo.
El paso de la EOS-1D X Mark III a la EOS R1 no supone un cambio de sistema, sino un salto de nivel. Para los fotógrafos que vienen de la cámara réflex insignia, la EOS R1 resulta muy familiar, pero ofrece mayor velocidad, tecnología más inteligente y un manejo más fiable. Está diseñada para aprovechar al máximo los sutiles detalles que marcan la diferencia en la fotografía de deportes.
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