Astrofotografía: sugerencias para la fotografía de estrellas y del cielo nocturno

Estar en el exterior por la noche y mirar a las estrellas es una experiencia verdaderamente mágica. Hoy en día, gracias a los avances tecnológicos de las cámaras, es más fácil que nunca salir y capturar las maravillas del cielo nocturno.

Aquí, exploramos cómo funciona la astrofotografía, el equipo necesario para la fotografía nocturna, incluidas las imágenes de rastros de estrellas y el time-lapse, y los mejores ajustes de la cámara y técnicas para la fotografía nocturna.

Antes de salir a hacer fotos, no olvides consultar el pronóstico meteorológico, ya que necesitarás un cielo nocturno despejado para conseguir la fotografía de estrellas más nítida. Dicho esto, un cielo parcialmente nublado puede aportar un ambiente distinto a las imágenes del cielo nocturno, así que dale rienda suelta a tu creatividad y aprovecha el tiempo. No pierdas de vista el viento: si las nubes están relativamente quietas, no tendrán un aspecto muy borroso en las fotografías en las que estés usando una exposición larga.

Lleva tarjetas de memoria y baterías de repuesto, una linterna de cabeza y ropa de abrigo. Recuerda guardar las baterías en los bolsillos, ya que se agotan más rápido cuando se exponen al frío.

Para obtener las mejores imágenes del cielo nocturno, tendrás que salir a la naturaleza y alejarte de cualquier contaminación lumínica. Busca un lugar tranquilo sin iluminación artificial. Las luces de la ciudad disminuyen la visibilidad de las estrellas, pero una luna llena o incluso media también lo hacen, así que consulta el calendario lunar cuando planifiques la sesión de fotografías de estrellas.

El mejor momento para fotografiar la Vía Láctea en el hemisferio norte es entre marzo y septiembre, que es cuando aparece más alta en el cielo. Intenta hacerlo entre medianoche y las 5 de la mañana, a ser posible en noches de luna nueva. La temporada de la Vía Láctea dura más en el hemisferio sur, desde febrero hasta finales de octubre.

Para fotografiar cielos estrellados debes tomar el control de la cámara, así que selecciona el modo manual (M) y prueba algunos de los diferentes ajustes que detallamos a continuación:

• Velocidad de obturación: las estrellas se mueven a medida que rota la Tierra, por lo que si quieres capturar puntos precisos de luz, ajusta la velocidad de obturación a un máximo de 20 segundos. Si extiendes el límite más, captarás rastros de estrellas.
• Abertura: también tendrás que utilizar un ajuste de abertura más amplio. Eso te permitirá dejar entrar la mayor cantidad de luz posible en la cámara al mismo tiempo que se mantiene un tiempo de exposición relativamente corto. Recuerda que una abertura amplia dará como resultado una profundidad de campo reducida, lo que significa que cualquier cosa que esté en el primer plano inmediato aparecerá desenfocada.
• ISO: el tercer factor que afecta a la exposición de tus fotos es el ajuste de ISO. Cuanto mayor sea el valor ISO, más sensible será el sensor a la luz que entra por la abertura. Ten en cuenta que si el número es demasiado alto, las imágenes empezarán a tener un aspecto granulado. Asegúrate de que la abertura y la velocidad de obturación te convencen antes de experimentar con los ajustes ISO. Prueba un valor ISO de 1600 al principio y ajusta a partir de ahí para ver cómo afecta a tus resultados.

La fotografía del cielo nocturno puede poner a prueba la capacidad de enfoque automático de cualquier cámara. Plantéate la posibilidad de cambiar al enfoque manual dándole al interruptor AF/MF del barrilete del objetivo Canon. Las cámaras mirrorless, como la EOS R6 y la EOS RP de Canon, ofrecen una vista preliminar ampliada de la escena en el visor electrónico y en la pantalla trasera, lo que permite un enfoque manual muy preciso. Otra ventaja es que el brillo de la imagen del visor aumenta automáticamente. Puedes disfrutar de las mismas ventajas con una cámara réflex, como la EOS 90D de Canon; solo tienes que componer tus fotos en el modo Visión en directo con la pantalla LCD trasera.

Las cámaras que cuentan con un elevado número de megapíxeles, como la EOS R5 de Canon, pueden tener un gran impacto en la fotografía del cielo nocturno, lo que permite conservar los detalles ultrafinos al fotografiar las estrellas. Puede ser el factor determinante entre que las estrellas más pequeñas y tenues sean claramente visibles y que desaparezcan por completo. Este nivel de detalle es especialmente importante si quieres producir impresiones de tus imágenes del cielo nocturno estrellado*.

Los objetivos con una clasificación de abertura «rápida» siempre son la mejor opción para la fotografía de estrellas, y no tienen por qué costar una fortuna. Por ejemplo, el RF 35mm F1.8 Macro IS STM de Canon es un objetivo para astrofotografía excelente. El campo de visión moderadamente amplio de este objetivo abarca una gran extensión del cielo nocturno, mientras que la rápida abertura atrae mucha luz y la estabilización óptica de la imagen permite realizar fotografías nocturnas sin trípode. Para capturar imágenes aún más extensas de la Vía Láctea, el RF 16mm F2.8 STM de Canon es perfecto, ya que combina un campo de visión ultra amplio y una abertura rápida con un diseño compacto.

Si prefieres la versatilidad añadida de un objetivo zoom, el RF 24-105mm F4-7.1 IS STM de Canon abarca desde un amplio campo de visión hasta una distancia focal telezoom, lo que significa que puede funcionar como objetivo para retratos y naturaleza. También cuenta con estabilización de imagen, lo que te permite ralentizar el obturador mientras capturas sin trípode. Para los fotógrafos que quieren una calidad aún mayor en este rango focal, el RF 24-105mm F4L IS USM de Canon ofrece una óptica de calidad profesional de la serie L y un sellado total contra las inclemencias meteorológicas.

El RF 28-70mm F2L USM de Canon es un espectacular zoom estándar para astrofotografía, con una abertura máxima de f/2 increíblemente rápida. Para obtener una mayor amplitud en el extremo más ancho, donde unos pocos milímetros dan mucho de sí, prueba el RF 24-70mm F2.8L IS USM de Canon.

El RF 15-35mm F2.8L IS USM de Canon es un zoom ultra gran angular que te permite capturar una enorme extensión del cielo nocturno sin renunciar a la rápida clasificación de abertura y una longitud focal del zoom flexible. El RF 14-35mm F4L IS USM de Canon es más compacto y una buena alternativa, ya que es solo un paso f más lento y proporciona un campo de visión máximo aún mayor. Descubre por qué los objetivos RF pueden darte una ventaja a la hora de capturar de noche en nuestra guía sobre el mejor equipo de Canon para fotografía con poca luz*.

Si estás buscando un zoom económico que se adapte a tu réflex de formato APS-C, el EF-S 17-55mm f/2.8 IS USM de Canon ofrece una calidad de imagen impecable y una clasificación de abertura rápida constante de f/2,8, algo inusual en esta clase.

Mejora tu fotografía del cielo nocturno mediante la inclusión de otros elementos para aportar más interés visual como edificios, árboles, montañas o lagos reflectantes. Cualquiera es una buena opción. A veces, fotografiar únicamente las estrellas puede dar como resultado imágenes que carecen de perspectiva o personalidad, por lo que siempre tienes que buscar algo único que puedas captar y que aporte más a tu imagen.

Aunque ajustar el objetivo a su distancia hiperfocal sea una técnica tradicional para mantener la nitidez en una escena desde el primer plano hasta el fondo, no resulta práctico con muchos objetivos modernos que carecen de una escala de distancia de enfoque. Si se revisan las distintas áreas de la pantalla trasera de la cámara con una vista preliminar ampliada, se consigue un enfoque manual preciso, pero dada la poca profundidad de campo de las aberturas amplias, puede resultar imposible enfocar toda la escena. Una opción es realizar dos o más fotografías con diferentes ajustes de enfoque y exposición, adaptados por separado a las zonas en primer plano y al cielo estrellado lejano, y después fusionarlas en una sola imagen con un programa de edición que incluya máscaras de capa, como Adobe Photoshop.

Si prefieres capturar todo en un solo disparo, pero las áreas del primer plano son muy oscuras, prueba a iluminarlas con un flash como el Speedlite 430EX III-RT de Canon mediante los disparos de uno o más pulsos de luz durante una exposición prolongada. También puedes dar rienda suelta a tu creatividad y hacer un barrido de luz sobre determinados objetos en primer plano y áreas de interés durante una exposición larga con una linterna, o incluso con los faros de tu coche si has ido conduciendo hasta donde vas a hacer la foto.

Capturar fantásticas líneas de luz que muestren el movimiento de las estrellas es todo un reto, pero puedes conseguir dominar la técnica con tan solo seguir unos sencillos pasos. Para empezar, localiza el polo norte, algo que puedes conseguir fácilmente con una aplicación de smartphone de mapas estelares. Posicionarte de modo que el polo norte (o el polo sur, si estás en el hemisferio sur) sea el punto focal de la fotografía y usar una exposición larga dará como resultado la formación de un patrón circular alrededor de una ubicación central. Recuerda que para cualquier fotografía con exposición larga, es importante utilizar un trípode para evitar el desenfoque por movimiento.

Las estrellas no emiten mucha luz, así que utiliza un valor ISO alto (800, 1600 o superior) para producir rastros de estrellas nítidos. Captura un par de fotos experimentales antes de realizar una exposición larga, ya que cuanto más alto sea el valor ISO, más probable es que se produzca «ruido» en la imagen.

Aunque las estrellas tardan 24 horas en dar una vuelta completa en el cielo, puedes conseguir un efecto de rastro de estrellas en forma de círculo completo con una exposición larga de entre 60 y 90 minutos. Si estás disparando en el hemisferio norte, ubicar la estrella Polaris en el cielo nocturno te dará un punto de referencia alrededor del cual parecerá que giran las estrellas.

La velocidad de obturación más lenta disponible en muchas cámaras es de 30 s, así que tendrás que usar el ajuste de exposición Bulb en modo manual (M). Esto te permite mantener el obturador abierto durante todo el tiempo que quieras. Define el enfoque en el infinito y, cuando esté todo listo, prueba a realizar una exposición de unos 30 minutos. Después, revisa la toma otra vez. Es posible que necesites unos cuantos intentos (y un poco de paciencia) pero al final obtendrás unos resultados que te encantarán.

Otra opción es crear un vídeo time-lapse del cielo nocturno. Muchas cámaras Canon, entre otras, la EOS R6, la EOS R5 y la EOS 90D, cuentan con un modo de grabación de vídeo Timelapse, para lo que utilizan un intervalómetro incorporado. Monta la cámara en un trípode, ajusta la velocidad de obturación a unos 20 segundos o más y configura la abertura y los valores ISO en consecuencia (f/4 e ISO 640 suelen combinar bien). Realiza un disparo de prueba, revisa los resultados y modifica lo necesario en los ajustes de exposición. A continuación, configura el intervalómetro para realizar disparos sucesivos cada dos minutos aproximadamente.

El tiempo total de grabación de la secuencia dependerá del tiempo que quieras que dure el vídeo time-lapse del cielo nocturno, así como de la frecuencia de fotogramas. Por ejemplo, una secuencia de 60 disparos a una frecuencia de fotogramas de 30 fps dará como resultado un vídeo time-lapse de dos segundos.

Un time-lapse de estrellas bien hecho puede ser sorprendente y hacer parecer que los cielos giran gradualmente ante tus ojos. Si tienes suerte, o planeas que la sesión coincida con una lluvia de estrellas, las estrellas fugaces atravesarán el encuadre, lo que aportará más a esta maravilla galáctica. Descubre cómo los profesionales captan este impresionante espectáculo celestial en nuestra guía para fotografiar lluvias de estrellas*.


Escrito por Matthew Richards


^{*Disponible en determinados idiomas.
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