«Cuando diseñas algo completamente nuevo, te encuentras con obstáculos que te hacen pensar: "Ya veo, por eso no se ha hecho todavía"», dice Makoto Hayakawa, jefe de desarrollo y diseño mecánico (en el centro, sosteniendo el objetivo). «Con el RF 100-300MM F2.8L IS USM, hemos conseguido el máximo nivel de rendimiento óptico, fiabilidad, velocidad de AF y precisión en un cuerpo ligero. Creo que hemos sido capaces de lograr una reducción de peso sin comprometer ni un solo factor».
El RF 100-300MM F2.8L IS USM es el primer objetivo 100-300 mm f/2,8 de Canon. Combina la versatilidad de un zoom con la velocidad de enfoque, la nitidez y la calidad óptica de un objetivo de focal fija, con una rápida abertura máxima de f/2,8 en toda su longitud focal de zoom y estabilizador óptico de imagen de 5,5 pasos. Como objetivo RF insignia de la serie L, incorpora nuevas tecnologías y está diseñado para ser compatible con las últimas funciones de la cámara, como disparos a alta velocidad y mejor detección y seguimiento de sujetos. Además, todo esto lo logra siendo el objetivo más ligero de su categoría.
¿Cómo se diseñó este avanzado objetivo? ¿Qué retos tuvieron que superar sus creadores? ¿Y qué avances técnicos se realizaron para producirlo?
Para averiguarlo, hemos hablado con los diseñadores y desarrolladores del objetivo para que nos lo cuenten todo.