Cómo reunir el equipo perfecto

Al principio de tu carrera como fotógrafo profesional es importante actuar con inteligencia e invertir en el equipo adecuado para tu estilo. Por ejemplo, es fundamental que elijas objetivos versátiles que se adapten a los cambios en tus necesidades a medida que evoluciones y explores distintos caminos. Pero ¿por dónde es mejor empezar?

El equipo que utiliza el embajador de Canon Emmanuel Oyeleke ha evolucionado a la par que sus habilidades fotográficas. Los inicios de este reconocido fotógrafo de origen nigeriano no fueron precisamente los más convencionales para alguien que se dedica a la moda y los retratos: «Estudié informática y me topé con la fotografía tras la universidad, cuando jugaba al Scrabble de forma profesional», explica. «Viajaba tanto que se me ocurrió que debería hacer fotos de mis viajes».

Tras asistir a un taller de fotografía de dos semanas en 2011, Emmanuel supo que había encontrado su vocación. Dejó su trabajo como programador informático y empezó su carrera en el mundo de la fotografía. Sus retratos e imágenes de moda y estilo de vida, que se caracterizan por un estilo artístico, le han ayudado a construir una cartera espectacular y una lista de clientes en la que figuran las principales revistas de Nigeria, además de marcas internacionales. Pero ¿qué hizo para crear un equipo que ha ido creciendo al mismo tiempo que él en su profesión?

Aquí, Emmanuel nos habla de la evolución de su equipo y ofrece consejos para los estudiantes que no saben por dónde empezar.

«Mi primer consejo sería que, al empezar, intentes sacar el máximo provecho a lo que ya tienes», dice Emmanuel. «Cuando empecé, tenía una Canon EOS 60D (a la que ahora sucede la Canon EOS 90D) que me esforcé por utilizar de las formas más creativas posibles y un Canon EF 50mm f/1.8 STM, un objetivo rápido que me permitió conseguir grandes retratos. Cuando empecé a fotografiar bodas y eventos, me di cuenta rápidamente de que no me bastaría con tan solo un objetivo de 50 mm, especialmente para fotografiar grupos y hacer fotos más amplias».

La siguiente inversión de Emmanuel mientras desarrollaba sus habilidades fue un zoom estándar equipado a la perfección para la fotografía de eventos y fiestas. «No tenía suficiente dinero para comprar el Canon EF 24-70mm f/2.8L II USM que quería, pero podía permitirme el EF 24-105mm f/4L IS II USM, así que lo compre y me aseguré de exprimirlo al máximo», continúa. «Ese objetivo me acompañó durante bastante tiempo y me permitió conseguir algunas imágenes espectaculares. Acabé tomándole mucho cariño, ya que, si bien la abertura no era tan rápida como la de mi objetivo de 50 mm, el enfoque era muy veloz. Descubrí que, al fotografiar eventos, no me perdía ni un instante. Esto acabó convirtiéndose en una ventaja, y pude usar mis Canon Speedlite para compensar la abertura y aumentar el ISO».

Para los estudiantes que quieren un juego de objetivos versátiles para usar con sus cámaras del sistema EOS R mientras crecen profesionalmente, los objetivos Canon RF Trinity son un buen punto de partida que cubre un amplio rango de longitudes focales. El RF 15-35mm F2.8L IS USM, el RF 24-70mm F2.8L IS USM y el RF 70-200mm F2.8L IS USM permiten fotografiar cualquier situación, desde paisajes, retratos y deportes hasta interiores y moda.

Emmanuel tuvo que ir adaptando su equipo a sus necesidades profesionales a medida que estas cambiaban. «Empecé fotografiando bodas porque necesitaba dinero, no porque lo deseara», admite. «Mi verdadera pasión era la fotografía de moda artística. Este cambio influyó en el equipo que necesitaba. Por ejemplo, descubrí que no necesitaba el EF 100mm f/2.8L Macro IS USM para la fotografía de moda. El EF 50mm f/1.4 USM cumplía con creces, y para fotografiar tomas gran angular compré el Canon EF 16-35mm f/2.8L III USM».

En la actualidad, Emmanuel raramente hace fotografía de bodas, pero todavía conserva su equipo. «No me gusta vender mi equipo por motivos sentimentales», explica. «Cuando comprendo todas sus complejidades, acaba convirtiéndose en una extensión de mi ser. Incluso después de cambiar las réflex por el sistema EOS R, conservé todos los cuerpos de la Canon EOS-1D X».

Todo este equipo sigue teniendo un lugar en su negocio. «En Emmanuel Oyeleke Photography tengo a personal en formación, y les dejo ese equipo para que lo utilicen en sus encargos, por lo que podríamos decir que es como un depósito al que se puede recurrir cuando es necesario».

En la actualidad, el equipo de Emmanuel consta de dos cámaras Canon EOS R5 —que son las que utiliza la mayoría de las veces— y una Canon EOS R. Utiliza la segunda EOS R5 como cámara de respaldo y la EOS-1D X Mark II (a la que ahora sucede la EOS-1D X Mark III) para la fotografía deportiva o de acción por su velocidad y capacidad de respuesta. Actualmente, su objetivo preferido es el Canon RF 50mm F1.2L USM. «Es mi objetivo de referencia, ya que es muy versátil, nítido y rápido, además de tener un diseño muy robusto», explica. «Lo uso para la fotografía de moda, estilo de vida y retratos».

El cambio de réflex a mirrorless ha sido ventajoso, y no solo por el peso. «Las cámaras del sistema EOS R son mucho más ligeras que las réflex», dice. «Tras entre 10 y 15 años llevando cámaras, empiezas a notar que el cuerpo se resiente. Además, el sistema de enfoque automático es mucho mejor y permite congelar la acción más fácilmente y sin esfuerzo. La tecnología mirrorless me permite centrarme más en la faceta artística de la fotografía que en la técnica, ya que las cámaras son mucho más inteligentes».

Al igual que el equipo de Emmanuel acaba convirtiéndose en una extensión de su ser, su flujo de trabajo sigue el mismo camino. «Mi mantra consiste en conseguir un buen resultado en la propia cámara, incluso si luego quiero aplicar efectos especiales o hacer pintura con luz, y para conseguirlo es importante contar con el equipo adecuado», explica. «Es algo que le viene muy bien a mi flujo de trabajo.

»Utilizo un administrador de fotos para ordenar, seleccionar y descartar archivos», añade. «Luego, los importo a Adobe Lightroom. Si una fotografía de moda o belleza necesita más ajustes, pasa a Adobe Photoshop. Sin embargo, ya pasé tiempo suficiente sentado delante del ordenador cuando era programador y no quiero repetirlo como fotógrafo. Prefiero crear y capturar imágenes».

Entre las herramientas más útiles para los estudiantes de fotografía que busquen algo de ayuda se encuentra el software Digital Photo Professional de Canon, que resulta muy útil para procesar, editar y organizar las imágenes. Y para la asistencia técnica y las reparaciones, Canon Professional Services (CPS) es un servicio gratuito para fotógrafos y videógrafos profesionales y semiprofesionales que utilizan determinados productos de Canon.

La experiencia de Emmanuel demuestra que no importa en qué fase de tu carrera te encuentres cuando construyas tu equipo. Si te esfuerzas en sacar el máximo provecho a lo que tienes y en aprender a usarlo de forma creativa en varias situaciones, descubrirás que merece la pena, tanto en el presente como para el futuro.

Adobe, Lightroom y Photoshop son marcas comerciales o marcas registradas de Adobe en Estados Unidos y otros países.