Echa un vistazo al equipo de una fotógrafa gastronómica profesional

La fotografía gastronómica requiere una habilidad artística especial. Se basa en la calidad y el atractivo de la imagen, pero también en el apetito que genera la imagen en todos los que la ven. Fotografiar comida sigue siendo tan popular como siempre, desde los libros de recetas llenas de sabor hasta las imágenes que llenan nuestros canales de redes sociales a diario. Pero debido al crecimiento del mercado, cada vez es más difícil destacar entre un mar de tablas de quesos.

Yasmin Albatoul, embajadora de Canon y fotógrafa gastronómica autodidacta, es conocida por su atractiva narrativa visual en torno a la comida.

¿Pero cómo consigue esas fotografías gastronómicas de un nivel superior con su estilo onírico, dinámico y colorista? Vamos a echar un vistazo a su equipo para descubrir sus herramientas de preferencia.

La mente de un fotógrafo es compleja y creativa. A menudo te hablarán de su fascinación por el oficio y el placer de ver el resultado final. Cuando Yasmin cocina, por ejemplo, a menudo piensa en cómo quedarán captadas sus delicias en la cámara, en lugar de en cómo sabrán.

Debido al proceso de la fotografía gastronómica, así como al tiempo y esfuerzo necesarios para conseguir la foto perfecta, Yasmin no suele probar las creaciones culinarias que fotografía. Puede que los ingredientes se hayan alterado y los platos hayan estado a la espera mucho tiempo, pero para Yasmin eso no importa: la cuestión es el amor por crear una imagen bonita, no tener que comerse lo que prepara. Y, como nos cuenta Yasmin, a veces la imagen sabe mejor que la comida real.

Debido a que gran parte de la magia de la fotografía reside en la visión artística y la habilidad del fotógrafo, elegir el equipo adecuado es esencial para conseguir la foto perfecta. Desde la longitud focal que elijas hasta cómo gestiones la luz, cada parte del equipo tiene un papel a la hora de crear la imagen ideal. Mientras analizamos el equipo de Yasmin, nos describe algunos de los equipos clave que utiliza y nos explica cómo cada pieza la ayuda a hacer su trabajo.


Cámara: Canon EOS R5

Por supuesto, empezaremos por el elemento más importante: la cámara.

«Utilizo la Canon EOS R5, que me apasiona y, por supuesto, supone una gran mejora en comparación con mi EOS 600D. Siento que este modelo en particular te permite resaltar la nitidez y los detalles, lo que es crucial cuando estás haciendo fotografías gastronómicas».

«Muchas empresas de restauración necesitan ampliar e imprimir las imágenes para los menús y carteles, además de para otras formas de publicidad que puedan emplear. Contar con un gran nivel de detalle sin sacrificar la calidad es importante para este fin. Es algo que no se puede conseguir realmente con la cámara de un smartphone».

El distintivo estilo de fotografía gastronómica de Yasmin suele conllevar que los alimentos se lancen o queden suspendidos en el aire. Si estás pensando en este tipo de fotografía, sin duda vas a necesitar la estabilidad de un trípode. La Canon EOS R5, la cámara favorita de Yasmin, también cuenta con estabilización integrada en el cuerpo, así que si fotografías a mano, podrás seguir alejándote con velocidades de obturación más lentas.

«Puede que la gente no se dé cuenta de que no estás simplemente haciendo una foto. En cualquier imagen que tenga movimiento, normalmente fotografías 10 o 20 imágenes diferentes utilizando la función de disparos en serie a alta velocidad, que en la EOS R5 te permite realizar hasta 12 fotos por segundo.

«Estas fotos se unen posteriormente en Photoshop o en un software similar, pero el uso de un trípode garantiza que consigas una imagen estable».

En muchas de sus fotografías, Yasmin utiliza el objetivo Canon RF 100mm F/2.8L MACRO IS USM. Este objetivo macro es increíblemente útil para captar esos mínimos detalles que a menudo se pasan por alto o incluso que son invisibles a simple vista. Si hablamos de fotografía gastronómica, esto puede aportar un nivel de detalle e interés que hace que la imagen sea mucho más atractiva.

«No paramos de usar el objetivo macro. Es muy importante y una tendencia que nunca parece pasar de moda. Los detalles son superimportantes en la fotografía gastronómica».

Estos detalles son especialmente importantes al fotografiar alimentos que, al ser motivos pequeños, suelen requerir los detalles de los primeros planos que ofrecen los objetivos macro. Ya sean los hoyuelos de una fresa, los reflejos en la piel de una manzana o la fresca explosión de un cítrico exprimido, resaltar los detalles puede hacer que tu imagen sea más dinámica, colorida e interesante. Otra forma de sumergir al espectador en la imagen es enfocar elementos concretos, y el cremoso bokeh producido por el mecanismo de control de la aberración esférica del objetivo Canon RF 100mm F2.8L Macro IS USM también puede ser muy atractivo para la fotografía gastronómica.

Si la profundidad de campo reducida no es lo tuyo o si necesitas que todo el motivo esté enfocado, puedes compensarlo con el muestreo del enfoque. Puedes hacerlo en la cámara (también en la EOS R5) o en posprocesamiento utilizando Digital Photo Professional (DPP).

Cuando sales a un restaurante, puedes hacer una foto rápida antes de hincarle el diente a la comida que tienes delante. Sin embargo, para un profesional, iluminar el motivo es un proceso más complicado.

Como señala Yasmin, los restaurantes no siempre están abiertos o disponibles cuando la luz natural está en su mejor momento, por lo que es indispensable usar un flash. Determinadas configuraciones de flash permiten una velocidad de obturación rápida, reduciendo al mismo tiempo la abertura para aumentar la profundidad de campo. El uso de un anillo de luz, en lugar de un flash normal, también puede ayudar a conseguir una iluminación uniforme.

«El uso de un flash ayuda bastante a conseguir la mejor foto posible. Consigo una buena imagen con la luz natural, pero un flash siempre me ofrece un resultado asombroso. Me permite ver los detalles más finos y obtener una mejor nitidez, además de colores adicionales. También hace que la imagen parezca mucho más comercial. Además, me permite fotografiar en cualquier momento y lugar, fuera del horario de los restaurantes».

Yasmin siempre lleva palillos de madera en su equipo, que son una parte menos evidente.

«Puede que suene inusual, pero siempre los llevo conmigo. Los alimentos no suelen ser muy colaborativos».

El uso de palillos de madera permite a Yasmin sujetar los alimentos en su lugar o inclusos suspenderlos para dar el efecto de movimiento. Después de hacer las fotos, los palillos se pueden eliminar en edición. No olvides que editar fotografías es un arte en sí.

También hay algunos elementos más inesperados dentro de su equipo, que le ayudan a crear el producto acabado. Hay pinzas que se utilizan para mover delicadamente los alimentos por el plato cuando es necesario, además de un rollo de cinta para colocar la comida en su lugar durante toda la sesión.

En ocasiones, las hojas de ensalada y otros alimentos son demasiado largos o están fuera de lugar, por lo que tener unas tijeras en el equipo es muy útil para cortarlos con el tamaño y la forma perfectos.

Y, para las salsas u otros líquidos que formen parte del plato, es esencial tener una pipeta a mano por si necesitas añadir unas gotas.

Al explorar de cerca el equipo de Yasmin, hemos conocido tanto los elementos evidentes como los menos evidentes que le permiten captar sus imágenes que en ocasiones desafían la gravedad.

Es importante usar el mejor equipo que puedas conseguir, aunque lo más importante es saber cuál es tu visión creativa y cómo puedes usar distintos equipos para unirlo todo. De la misma forma que Yasmin utiliza palillos de madera para sujetar los alimentos en su lugar, puede que haya otro elemento que te ayude a contar con esa ventaja y llevar tus fotografías gastronómicas al siguiente nivel.

Yasmin nos solo nos explicó los detalles de su equipo, sino que también dio consejos para todos los que quieran adentrarse en el mundo de la fotografía gastronómica e iniciar su viaje.

«Mi consejo para todos los fotógrafos es que sigan siendo curiosos y adopten una mentalidad de aprendizaje continuo. Siempre sigo aprendiendo, ya sea sobre nuevos objetivos, nueva iluminación o cosas así. Y cada vez que aprendo algo nuevo, aporta algo de valor a mi fotografía».

¿Quieres obtener más información? Lee los trucos y sugerencias de Yasmin para elevar tu fotografía gastronómica al siguiente nivel.