Para Pistol, serie que consta de seis capítulos, el director de fotografía Anthony Dod Mantle (en la imagen) sabía que necesitaba explorar nuevos terrenos y encontrar la tecnología y las técnicas que permitieran ajustar elementos visuales experimentales en el frenético plan de producción. «Hay mucha inversión», afirma. «Hay 200 personas aquí, el reloj no se para, es una combinación de disciplina militar y un puñado de artistas locos. Y en medio de todo eso, intento ganar algo de tiempo con las cosas que puedo ir haciendo sobre la marcha». © Miya Mizuno
El director de fotografía Anthony Dod Mantle llama «pinceles» a sus cámaras y objetivos, puesto que «algunas son más gruesas, otras tienen más aceite, otras más suciedad y otras más agua». También es una «manera fácil de evitar tener que decir los números y los nombres todo el rato y tener que recordarlos».
Para Pistol, la serie de FX, una celebración frenética del punk rock de los 70 que repasa el ascenso meteórico y el descenso caótico de los Sex Pistols, el cineasta ganador de un Óscar necesitaba una paleta más grande de lo normal, con más de seis sistemas de captura de imágenes funcionando a la vez en algunos puntos de la grabación. «Supongo que se podría decir que los distintos formatos [de las cámaras] representan instrumentos con sus propios detalles, tonos y potencial nivel de ruido, hasta que se combinan en una mezcla final durante la edición», afirma.
En este artículo, Dod Mantle y Danny Boyle, su colaborador y amigo desde hace mucho tiempo y ganador de un Óscar, quien dirigió el proyecto, hablan sobre las cámaras y los objetivos de Canon que utilizaron para grabar la serie y la razón por la que eran las mejores herramientas para esta producción única.