A diferencia de muchas destinatarias de la beca, la fotógrafa documental estadounidense y ganadora en 2018 Laura Morton invirtió el dinero en contar una nueva historia: su proyecto University Avenue explora dos comunidades colindantes en el Área de la Bahía de California separadas por una marcada desigualdad de riqueza.
«Llevaba tiempo con la idea, pero sabía que era un proyecto complicado que llevaría bastante tiempo», cuenta Laura, que fotografió gran parte de University Avenue con una cámara Canon EOS R y un objetivo Canon RF 35mm F1.8 MACRO IS STM. «La beca me proporcionó la libertad económica que necesitaba para dedicar ese tiempo al proyecto. Tener tiempo para trabajar es un regalo para una fotógrafa documental, y la beca permite desarrollar historias más sutiles y profundas.
»A la hora de enviar tu solicitud, reflexiona sobre lo que hace que tu voz y tu historia sean únicas. Es un sector muy difícil, pero tener ideas innovadoras te ayuda a llegar lejos». Las temáticas principales que Laura trata son la economía y la riqueza. Sus imágenes han aparecido en publicaciones como National Geographic, Marie Claire, Newsweek, The Wall Street Journal y The New York Times.
En el momento de solicitar la beca en 2022, la fotógrafa documental residente en París Natalya Saprunova se sentía desmotivada como fotoperiodista. Los argumentos de sus historias tenían lugar en territorio ruso y, conforme iba aumentando el impacto de la guerra en Ucrania, la prensa empezó a rechazar la publicación de su trabajo. Pero, a pesar de que los sucesos recientes eclipsaran las historias en las que estaba trabajando a largo plazo, siguió confiando en ella misma.
«La solicité una vez acabé el primer capítulo de mi trabajo, que trataba sobre el pueblo sami ruso y la pérdida de su estilo de vida nómada debido al asentamiento forzado durante la era soviética. Mi consejo es que la solicites, aunque tengas dudas porque pienses que el trabajo no está "listo" o no es "lo suficientemente bueno". Aprovecha la oportunidad para preparar la solicitud; te ayudará a perfeccionar tu proyecto y a seguir avanzando», afirma. Natalya ahora se centra en problemas sociales relacionados con las crisis medioambiental y climática, especialmente relacionadas con el deshielo del permafrost en el Extremo Norte. Sus fotografías han aparecido en publicaciones como The Washington Post, Geo, Le Figaro, The Guardian, Le Pèlerin, Corriera Della Sera, The Globe y Mail.
Para Axelle de Russé, ser seleccionada como la mejor fotoperiodista de Canon en 2007 por su historia fotográfica sobre las concubinas en China fue un momento crucial en su carrera.
«Recibir la beca supuso una enorme fuente de presión, pero también resultó ser una oportunidad instructiva», explica. «Fue el desencadenante, el momento fundacional de mi carrera. Todas las historias que produzco están basadas en los pasos y las decisiones que tomé en ese momento. Me enseñó a desarrollar una historia».
En 2014, documentó la vida cotidiana de víctimas de violencia sexual en el Ejército francés y ahora lleva desde 2016 informando sobre las consecuencias del cambio climático en el Ártico.
»La beca siempre tendrá un lugar especial en mi vida: hizo que progresara y me animó a continuar, me proporcionó la confianza que necesitaba para convertirme en la fotógrafa que soy a día de hoy».