ARTÍCULO
Documentando la Sudáfrica post apartheid
La fotoperiodista Ilvy Njiokiktjien nos habla de «Born Free», su proyecto multimedia de una década, realizado con la EOS 5D Mark IV de Canon.
ARTÍCULO
¿Qué aspecto tiene un fotoperiodista? Al margen de otras cosas, casi siempre es un hombre. Un informe del Instituto Reuters para el Estudio del Periodismo de la Universidad de Oxford, basado en una encuesta online entre participantes del concurso World Press Photo (2007-2018), reveló que solo el 15 % eran mujeres. Además, estas mujeres ganaban menos que sus colegas varones, era más probable que trabajaran a media jornada y tenían menos probabilidades de que las contrataran grandes agencias de noticias. ¿Por qué sigue habiendo más hombres que mujeres en la fotografía de noticias? Es complicado esclarecer los motivos. A continuación, exploramos si la desigualdad de género es un síntoma del machismo de la sociedad en general o se trata de un problema específico en este trabajo.
Aunque sin duda siguen existiendo barreras que superar, también hay signos de que se está avanzando, gracias en parte a iniciativas como el premio anual a la mejor mujer fotoperiodista de Canon, que reconoce el talento de las mujeres del sector, y a Women Photograph, un directorio online de fotoperiodistas mujeres y de género no binario que ofrece orientación, becas y talleres.
En Visa pour l'Image 2019, el festival internacional de fotoperiodismo de Perpiñán (Francia), hablamos con un grupo de mujeres fotoperiodistas y editoras de fotografía sobre sus experiencias al trabajar en un mundo dominado por los hombres y sus ideas para hacer que el sector sea más accesible en el futuro.
«Me ha pasado que un editor me preguntara cuál es mi situación familiar y si estoy pensando en tener hijos. Estoy segura de que a un hombre no le habrían preguntado algo así», cuenta la embajadora de Canon Ilvy Njiokiktjien.
Chloe Coleman, editora de fotografía de The Washington Post, afirma que sigue habiendo desafíos aun trabajando con una plantilla diversa. «Tengo suerte de trabajar en The Washington Post porque nuestra redacción es muy diversa en general. Creo que el hecho de ser editora de fotografía joven puede ser difícil independientemente de donde estés, y por las mismas razones por las que es difícil para las mujeres jóvenes que trabajan en cualquier sector. ¿Cómo consigo que las personas me escuchen? ¿Cómo puedo hacer que estén abiertas a mis ideas? Quiero que las personas respeten mi voz y mi visión. Sin embargo, creo que por desgracia es algo difícil para las mujeres jóvenes en muchos sectores».
«Las mujeres suelen tener mucha menos confianza en sí mismas, y creo que eso empieza incluso desde el colegio», afirma la nominada de Magnum Nanna Heitmann, acordándose de una ocasión en la que un alumno de su clase pidió 2500 $ al día por fotografiar un trabajo comercial. «No consiguió el trabajo», continúa, pero no puede evitar comparar esta mentalidad con la de una fotógrafa que «con bastante frecuencia acepta la primera cantidad que le ofrecen porque teme que le digan que no si pide más dinero».
«La gente piensa que si contrata a una fotógrafa, creará una historia más emocional», explica Ilvy. «No estoy de acuerdo. La mayoría de mis mentores son hombres y son los fotógrafos más sensibles que conozco».
«El hecho de ser mujer a lo mejor sirve de ayuda porque la gente no te toma tan en serio y quizá por eso no les impone tanto», dice Nanna. «A veces voy con mi cámara pequeña y la gente no piensa que soy periodista. Y por otro lado, obviamente es una ventaja cuando entras en un mundo de mujeres, especialmente en países musulmanes». Ilvy está de acuerdo: «Fotografié un hospital de mujeres en Afganistán, algo que un fotógrafo hombre jamás podría haber hecho».
Un modo posible de fomentar la participación de más mujeres es mediante becas específicas, como el premio a la mejor mujer fotoperiodista de Canon de Visa pour l’Image, que cumple 20 años en 2020.
«Las becas para mujeres son muy útiles», afirma la fotoperiodista Camilla Ferrari. «Las mujeres no participan tanto [en concursos abiertos]. Las becas para mujeres impulsan a las fotoperiodistas, por lo que deberían fomentarse». Sin embargo, añade que hay que tener cuidado y evitar una discriminación positiva que se sienta «forzada». «Quiero que se me valore por mi trabajo, no por ser mujer. Eso es peor que no ganar nada».
Nanna ofrece una perspectiva diferente: «Muchas personas están en contra de las cuotas, pero quizás son necesarias al principio para provocar algunos cambios en el sector, y a lo mejor después este mundo cambie por sí solo».
Según Chloe, «Al final, el objetivo debería ser que las becas dejen de ser necesarias, y que los hombres, las mujeres y las personas de todo tipo y raza pudieran competir por las mismas becas y en las mismas competiciones en igualdad de condiciones».
«En realidad, no creo que gran parte de la discriminación que sufrí como mujer fuera a propósito», dice la ganadora del premio a la mejor mujer fotoperiodista de Canon en 2018, Laura Morton. «Creo que fue inconsciente. Y pienso que ahora que se habla sobre este tema, las personas son mucho más conscientes de sus decisiones a la hora de contratar a alguien, y quizás piensan más en cuáles pueden ser sus prejuicios inconscientes para intentar superarlos.
«Mi primer trabajo fue de prácticas en el Seattle Times», continúa Laura. «Durante nuestra orientación como becarios, nos entregaron un papel con el desglose étnico de la ciudad. Nos dijeron que si cubríamos eventos de la comunidad y nuestras fotos no lo reflejaban, debíamos pensar en nuestros prejuicios y remediarlo. Me pareció muy interesante».
«Creo que no se pone suficiente empeño en ir más allá de las personas que todos conocen para encontrar nuevas voces», afirma Chloe. «Están ahí fuera y existen, la cuestión es cómo conseguimos que esas voces se publiquen. ¿Cómo hacemos que esas voces lleguen a ser nombres conocidos?». Insiste en que está en manos del juicio personal de los editores y de los fotógrafos individuales que contratan. «Puede que una imagen no le parezca estereotípica o peyorativa a un determinado editor de fotografía, pero que sí se lo parezca a otro con unos orígenes o una experiencia diferentes. Esa diversidad de voces es necesaria tanto en los editores como en los fotógrafos».
«Los fotoperiodistas solían ser mayoritariamente hombres, es más, hombres occidentales», explica Magdalena Herrera, directora de fotografía de GEO France y mentora del programa para estudiantes de Canon de 2019. «Ahora hay mucha más diversidad; la fotografía se ha desarrollado en regiones como el Sudeste Asiático, Latinoamérica, África... Hay fotógrafos locales en el terreno y las revistas trabajan con ellos por muchas razones diferentes, a veces son económicas, pero también se debe a que necesitan otros puntos de vista. Respecto al nivel social, el fotoperiodismo sigue estando reservado a la clase media o acomodada. No ocurre tanto en el mundo occidental, pero sí en el resto del mundo. En Latinoamérica, no eres fotógrafo si no provienes de una familia acomodada. Una familia sin recursos gastará el dinero en una profesión que te ayude a subir en la escala social. Es algo que está cambiando, pero requiere tiempo».
«Económicamente, no es la carrera a la que resulta más fácil acceder, y eso es un gran problema», dice Laura. «Trabajé en eventos de sociedad durante 10 años para pagar las facturas mientras construía mi carrera. No es necesario que mis padres me mantengan, pero sé que si ocurre algo realmente malo puedo contar con ellos. En este sector hacen falta más personas de diferentes orígenes socioeconómicos y étnicos. Esto es muy importante, es la manera de que la gente vea cómo es el resto mundo».
Escrito por
Los retratos de este artículo los realizaron Laila Sieber y Aliona Kardash bajo la orientación del embajador de Canon Daniel Etter como parte del programa de creación de contenido de estudiantes de Canon de Visa pour l'Image 2019 de Perpiñán (Francia).
«En esta serie de fotos tratamos el tema de la visibilidad y la representación de las mujeres en el sector. Como Visa pour l’Image y Perpiñán desempeñan un gran papel en el debate sobre la representación de las mujeres (y a que las fotógrafas siguen sin estar suficientemente representadas allí), nos parecía importante utilizar la luz natural y lugares de la ciudad como fondo», explican Laila y Aliona.
«Para capturar los retratos, queríamos trabajar con una herramienta visual que por un lado atrajera la atención a nuestras protagonistas y por otro unificara los retratos de las fotógrafas, ya que todas afrontan los mismos problemas o similares. Decidimos trabajar con un pequeño espejo de bolsillo, que nos permitió poner el foco en la mirada de las mujeres de un modo sutil, al mismo tiempo que se creaba la narrativa visual».
ARTÍCULO
La fotoperiodista Ilvy Njiokiktjien nos habla de «Born Free», su proyecto multimedia de una década, realizado con la EOS 5D Mark IV de Canon.
Eventos
Cómo Canon y el proyecto Unfiltered del CICR proporcionan a las personas de zonas inestables las herramientas y la formación necesarias para que narren sus propias historias a través de la fotografía.
ARTÍCULO
La fotógrafa de Magnum Photos comparte cinco cosas que ha aprendido a lo largo de su carrera, desde dejarse guiar por la situación hasta cómo elegir un objetivo.
ARTÍCULO
Desde la posición de la cámara hasta el planteamiento de las duras preguntas, así es como el equipo de «Woman» abordó sus impactantes entrevistas.
Haz clic aquí para disfrutar de historias inspiradoras e interesantes noticias de Canon Europe Pro