«Al acostumbrarme a disparar siempre con equipo grande, había acabado instalado en una cierta rutina», revela Dave Mackison, fotógrafo de deportes de acción residente en Escocia. «A menudo llevo en el equipaje luces de estudio a batería, pero al final solo las utilizo en el ajuste más bajo. Poder utilizar el Speedlite EL-1 de Canon y la luz de viaje en esta sesión concreta ha cambiado totalmente las cosas para mí».
La sesión en cuestión fue un encargo de tres días para grabar a su amigo Duncan Shaw, ciclista profesional de montaña y trial, que estaba haciendo un recorrido lleno de acción por las calles de Bristol, en el sudoeste de Inglaterra. Pero no se trataba de un recorrido cualquiera en bicicleta por la ciudad. En lugar de seguir la calle, Duncan hizo todo tipo de paradas, equilibrios y saltos en los elementos del entorno urbano que se iba encontrando, y el fotógrafo tenía que seguir el ritmo. Este exigente trabajo de acción fue la primera grabación profesional con el Speedlite EL-1 de Canon, y una prueba excelente de las capacidades del flash.
Este tipo de sesión a alta velocidad no es nada nuevo para Dave, después de haber comenzado su carrera como fotógrafo profesional en la gira del espectáculo de acrobacias en bicicleta Drop and Roll, que Duncan y su compañero ciclista de street trial Danny MacAskill llevaron a cabo en 2014. «Me uní al proyecto para ayudar con algunos trabajos de construcción», explica Dave. «Pero cuando llegamos a nuestro primer espectáculo en Suiza, no teníamos fotógrafo. Así que acabé comprando una cámara en el último momento y fotografiando el evento». A partir de entonces, empezaron a llover los encargos, y Dave cuenta ahora entre sus clientes habituales a Red Bull, Adidas y Santa Cruz Bicycles.
Ser capaz de viajar ligero y reaccionar rápidamente sin sacrificar potencia de iluminación eran requisitos esenciales para este último trabajo. Así que, en lugar de disparar con su actual equipo, más pesado, Dave utilizó una combinación de dos flashes profesionales Speedlite EL-1 de Canon y una EOS R5 de Canon