Iluminando los deportes de acción
La fotografía de Jaime es resultado tanto de su sofisticado estilo de iluminación como de los objetivos que elige. «Mi estilo fotográfico es muy agresivo y rico en contrastes», declara. «Para destacar la acción y el impacto de los deportes extremos, me gusta generar grandes diferencias entre las luces y las sombras, buscando un alto nivel de saturación de color, como si disparara con el sol de cara».
Para conseguirlo, Jaime confía en varias unidades de flash que no están acopladas a la cámara. «El flash me proporciona la que necesito para expresar mi creatividad», explica. «En ocasiones, durante la hora dorada utilizo flashes Speedlite 600EX-RT de Canon [que ahora han sido reemplazados por los Speedlite 600EX II-RT de Canon]. Funcionan extremadamente bien fuera de la cámara, y trabajar con el transmisor Speedlite ST-E3-RT de Canon es tan rápido como sencillo».
Cuando la luz es muy intensa, los flashes deben estar más alejados del deportista, y cuando Jaime decide utilizar un modificador de la iluminación, como una caja de luz, suele decantarse por las unidades de flash externo de gran tamaño. «Si necesito mucha potencia, utilizo un Elinchrom ELB 1200, ya que me permite cerrar la abertura hasta f/5,6 e instalar el flash a cuatro metros o más del sujeto por seguridad».
Independientemente del sistema de flash elegido por Jaime, siempre trabaja de la misma manera para garantizar una exposición perfecta una y otra vez. «Necesito tenerlo todo bajo control, así que mi única opción es controlarlo todo de forma manual», explica. «Lo primero es pensar en la velocidad de obturación, ya que tengo que congelar totalmente el movimiento. En estas imágenes de BMX, la velocidad de obturación más baja es de en torno a 1/640 s».
Si necesita una abertura más amplia para conseguir la exposición correcta, ese es el siguiente paso. Pero si una abertura amplia, como el ajuste f/2,8 del objetivo EF 70-200mm f/2.8L IS III USM de Canon, no proporciona la profundidad de campo necesaria, entonces incrementa el ISO de la cámara. En el caso de la EOS-1D X Mark II de Canon, Jaime considera que el ruido está tan bien controlado que no necesita adaptar el resto de los ajustes en torno a un valor de ISO aceptable, sino que puede ajustar el ISO en último lugar.
Es la última pieza de un rompecabezas formado por la iluminación, la composición, el deportista y el emplazamiento, una amalgama de factores que deben combinarse a la perfección si se quiere conseguir una foto de acción exquisita. La combinación de la EOS-1D X Mark II de Canon con la rápida abertura máxima de f/2,8 del objetivo EF 70-200mm f/2.8L IS III USM de Canon pone al servicio de Jaime las opciones que necesita para crear las espectaculares y deseadas imágenes que tanto buscan sus clientes y que les traen de vuelta una y otra vez.