Ver el mundo con otra luz: cómo la fotografía infrarroja puede potenciar tu creatividad

Como fotógrafo profesional de viajes y paisajes, David Clapp suele desplazarse a ubicaciones de todo el mundo en busca de imágenes impactantes para su porfolio profesional. Fotografía, organiza recorridos fotográficos y suministra a empresas de lienzos imágenes de viajes para decoración del hogar. Algunas de las imágenes más valiosas de su porfolio de los últimos años se capturaron con infrarrojos.

Para el fotógrafo británico, maximizar su creatividad ahora significa llevarse dos cámaras: una para tomas en color estándar (la más reciente una EOS R5 de Canon) y la otra para fotografía infrarroja (una EOS RP de Canon convertida). A continuación, nos cuenta sus técnicas para la fotografía IR.

La fotografía infrarroja, también conocida como «fotografía IR», registra longitudes de onda de luz más allá del espectro visible, y crea imágenes de otro mundo en las que los colores o los tonos suelen ser completamente distintos de los que vemos normalmente. Esto ofrece la oportunidad de captar imágenes impactantes en situaciones poco prometedoras.

«El color depende muchísimo del ambiente y las condiciones de iluminación, pero los infrarrojos prácticamente funcionan en cualquier momento del día», comenta David. «Puedes fotografiar algo muy común y cotidiano, y convertirlo en algo único. Le ha dado a mi trabajo una identidad muy marcada».

David es fotógrafo profesional desde 2005, y las imágenes infrarrojas han sido una parte de su negocio desde hace 13 años. Hasta hace poco, seguía dos métodos para crearlas. Uno era disparando con un filtro de infrarrojos acoplado al objetivo, que bloqueaba gran parte o todo el espectro de luz visible, por lo que las exposiciones eran muy largas.

«Capturar una escena de exterior con luz solar intensa con un filtro de infrarrojos de rosca de 720 nm (nanómetros) solía requerir una exposición de 30 segundos», afirma David. «Conseguía una sensación etérea gracias, por ejemplo, a las nubes difuminadas por el movimiento durante la exposición, pero al mismo tiempo no resultaba práctico».

De esta manera, David puede usar filtros de infrarrojos de distintas longitudes de onda mediante el adaptador de montura EF-EOS R con filtro drop-in de Canon. Puesto que el adaptador se usa para acoplar objetivos EF a un cuerpo del sistema EOS R, David tenía que usar objetivos EF. «No hay problema», afirma. «No se pierde calidad al usar el adaptador y no creo que los objetivos que tengo limiten de ninguna manera mi estilo de trabajo».

Es importante recalcar que el uso del adaptador no solo le permite crear imágenes con diferentes efectos infrarrojos, sino que también le da la posibilidad de capturar con las mismas longitudes de exposición y ajustes ISO que usa en la fotografía convencional.

David decidió hacer la conversión de espectro completo en su EOS RP de Canon. «He usado mucho la EOS RP; era la cámara para fotografías en color que usaba a diario», comenta. «Para mí, la clave de la fotografía es el perfeccionamiento de conceptos y la exploración de ideas. La cámara está ahí para capturar esa exploración. Captura imágenes de 26 MP, y es compacta y discreta. Tener algo pequeño que la gente apenas percibe es importante cuando viajo. Así que, cuando decidí meterme en el universo de los infrarrojos, esta es la cámara que escogí».

En un viaje a Vietnam en 2022, David capturó imágenes infrarrojas en su cámara EOS RP de Canon convertida y fotografías en color en una EOS R5 de Canon. En Hanói y otras cuatro ciudades entre las que se incluye Ho Chi Minh, David capturó una mezcla de paisajes, arquitectura, y escenas y retratos urbanos.

Los filtros para fotografía infrarroja comienzan en una longitud de onda de unos 450 nm y llegan a 840 nm. David decidió llevarse tres filtros infrarrojos para el viaje. Uno era un filtro de 590 nm, que permite que llegue más luz al sensor para crear coloridas imágenes infrarrojas con vegetación dorada y cielos azul brillante después del procesamiento (intercambio de canales) mediante software.

David capturó imágenes convencionales en color con una EOS R5 de Canon, y entre ellas habían paisajes texturizados de terrazas de arroz y retratos urbanos. Lo que valoró especialmente fue la precisión y velocidad del enfoque automático de la cámara, así como su estabilización de imagen. «Fue realmente extraordinario», confiesa. «Solo tuve que usar el trípode una vez en todo el viaje; tenía mucha confianza en que capturaría imágenes nítidas sin él, incluso con la iluminación del anochecer y el amanecer.

La función de seguimiento de caras es absolutamente fantástica para imágenes de personas, aunque se trate de niños que no se están quietos. Por ejemplo, una vez estaba capturando retratos de un niño que estaba meciéndose de un lado a otro en una hamaca. Al usar AF AI Servo junto al seguimiento de caras, el enfoque se bloqueó en su cabeza y me dio la opción de elegir uno de los ojos. Las imágenes resultaron nítidas y repletas de detalles. Esta función fue toda una revolución para mí».

Las imágenes en color convencionales siguen teniendo mucho interés y potencial para David, pero lo que le entusiasma especialmente es fotografiar con diversos efectos infrarrojos. Si bien conviene destacar que Canon no recomienda hacer a la cámara una conversión de espectro completo y que se trata de un procedimiento irreversible que invalida la garantía, para David ha abierto las puertas a la creación de diferentes tipos de imágenes.

«La libertad que te da capturar en infrarrojo de esta manera da rienda suelta a la creatividad y es muy liberador artísticamente», comenta. «Puedes fotografiar con distintas longitudes de onda de infrarrojos y también puedes, por ejemplo, capturar la misma escena con distintos filtros y combinar las imágenes. Te abre la mente para pensar en el mundo en una frecuencia completamente distinta, lo que quiere decir que te entrenas para ver el mundo de una manera totalmente única».

Además de la fotografía infrarroja, David también planea capturar imágenes con luz que está en el espectro ultravioleta (por debajo de 380 nm) mediante un filtro de paso de banda que transmite rayos ultravioleta en su adaptador de montura EF-EOS R con filtro drop-in de Canon. «Aún no he probado a capturar con luz ultravioleta, pero tengo ganas de hacerlo», comenta. «Al usar estas distintas frecuencias, la cámara se vuelve totalmente mágica. Me da posibilidades infinitas».