Ejiro Dafé solo fotografía con objetivos de 50 mm, por lo que era el fotógrafo perfecto para probar primero el Canon RF 50mm F1.8 STM. «La longitud focal de 50 mm te permite ser más instintivo al fotografiar, aunque al mismo tiempo, debido a las limitaciones con las que cuenta, supone un reto a tu creatividad», afirma.
El fotógrafo y director creativo Ejiro Dafé, residente en Londres, cuenta con un enfoque muy característico a la hora de realizar sus encargos: solo utiliza un objetivo de 50 mm.
Ejiro comenzó a fotografiar de esta forma durante su etapa como estudiante de pocos recursos: «Estaba estudiando Publicidad y usé mi préstamo estudiantil para comprar una cámara EOS 5D Mark III de Canon (a la que ahora sucede la EOS 5D Mark IV) para grabar mis propias campañas publicitarias. También acabé enamorado del fotoperiodismo, y todos los fotógrafos en los que me fijaba utilizaban objetivos prime. Así que adquirí el pequeño y asequible objetivo EF 50mm f/1.8 II de Canon (al que ahora sucede el EF 50mm f/1.8 STM) y viajé a otros países para captar historias urbanas.
«No tenía pensado utilizar ese objetivo durante tanto tiempo, pero al final me acostumbré a su ángulo de visión. Me gustaba la forma en que se acercaba a mi campo de visión y, además, fotografiar con él se volvió algo instintivo: podía mirar cualquier cosa y determinar cómo se alinearía en una toma. Eso me dio la confianza necesaria para seguir fotografiando».
A medida que aumentaba sus ingresos gracias a sus trabajos remunerados, Ejiro decidió dar el salto al EF 50mm f/1.4 USM, al que le siguió el EF 50mm f/1.2L USM de Canon. Gracias a su experiencia y entusiasmo por la longitud focal se convirtió en el primer profesional que utilizó el RF 50mm F1.8 STM de Canon, el objetivo estándar más ligero y asequible de la gama RF.