Una carrera contrarreloj
El principal desafío de Drew fue conseguir la foto en el tiempo asignado. Para encontrar una franja horaria adecuada había que trabajar en función de la disponibilidad de los coches, ya que estaban preparándolos para las sesiones de entrenamiento y clasificación, así como para la carrera en sí.
«Los fines de semana de carrera son muy ajetreados y las actividades adicionales, como la fotografía, entran en conflicto con la programación del equipo», explica Drew. «Los organizadores de la carrera nos dieron tan solo media hora para sacar los coches a la pista, hacer las fotos y devolverlos a boxes. Tenía un plan y estaba tan preparado como podía».
Teniendo en cuenta el tiempo necesario para mover los vehículos, a Drew solo le quedaban 20 minutos para la sesión, por lo que no tenía margen de error. Drew seleccionó el equipo adecuado para el trabajo (un equipo en el que sabía que podía confiar) y eligió una EOS 5D Mark III con un objetivo zoom ultra gran angular EF 17-40mm f/4L USM de Canon.
«Normalmente hago las fotografías de las carreras con la EOS-1D X Mark II de Canon (a la que ahora sucede la EOS-1D X Mark III), pero pesa un poco para montarla en los coches, así que utilicé la EOS 5D Mark III porque es mucho más ligera y crea unas imágenes espectaculares», afirma Drew. «Prefiero fotografiar con objetivos prime, pero 14 mm es demasiada amplitud para este tipo de imágenes y 24 mm no es suficiente. El objetivo EF 17-40mm f/4L USM de Canon me da más flexibilidad y además solo necesito un tamaño de filtro para cubrir todo el espectro de longitud focal».