Boxeo inteligente: Elizabeth Kreutz habla sobre fotografiar el impactante dramatismo de un combate de Manny Pacquiao

En la fotografía de deportes, la diferencia entre una buena foto y una fantástica depende de la sincronización. Esto es especialmente evidente en el boxeo, donde la acción se produce a una velocidad vertiginosa. Aquí, la fotógrafa de Texas Elizabeth Kreutz revela cómo captura los momentos más impactantes de una pelea y el kit de Canon que utiliza.

Fotografiar un combate de boxeo no es apto para cardíacos. «Esperas el momento en el que tengas la oportunidad de conseguir una foto ganadora», dice Elizabeth. «Tienes que esperar y estar preparada. Me encanta lo impredecible que es. Tengo un nudo en el estómago. Estoy con el corazón en la boca todo el tiempo. Tengo que estar lista y ser rápida, porque nadie va a esperarme».

«Hay momentos en los que un segundo antes es muy diferente de un segundo después. Por eso, cuando fotografío necesito una velocidad de ráfaga muy alta».

Las cámaras Canon EOS-1D X de Elizabeth le ofrecen otra ventaja que sale a la luz en su trabajo documental: lo que ella denomina «ISO atractivamente alto». Esto es fundamental porque fotografía casi siempre sin flash, para molestar lo mínimo posible durante los preparativos y las sesiones de entrenamiento de los deportistas entre bastidores. Así puede conseguir fotos naturales.

«Cuando estoy en los vestuarios trabajando con la luz disponible, necesito saber que mi objetivo tiene la apertura máxima. Así puedo aumentar el ajuste ISO para conseguir una velocidad de obturación con la que no se produzca efecto de desenfoque del movimiento. Eso es lo que quiero y cómo cuento mis historias».

«Llevo haciendo esto 16 años y antes solía preocuparme aumentar el ajuste por encima de ISO 1600», afirma. «Pero ahora fotografío con ISO 8000 sin preocupaciones. Lo hago con confianza».

Cuando la Canon EOS-1D X se presentó por primera vez, contaba con un rango ISO ampliado capaz de llegar a 204800. La EOS-1D X Mark II lo llevó hasta 409600. «En algunos momentos hago las fotos con flash porque es imprescindible y necesario, pero prefiero no hacerlo», dice Elizabeth, «así que el 90 % de las veces no lo uso».

La Canon EOS-1D X tuvo un profundo efecto en Elizabeth durante su primera salida con ella. «Ya tenía la Canon EOS-1D Mark IV, que me encantaba, pero cuando fotografié mi primer combate en el Madison Square Garden, utilicé dos cuerpos; la EOS-1D Mark IV y la EOS-1D X por primera vez. Durante la edición, pude determinar de inmediato las imágenes que había capturado con la 1D X debido a los colores más vibrantes con ISO alto. En todos los combates desde entonces, solo fotografío con la Canon EOS-1D Xs».

Hasta ese momento, nunca había fotografiado a fotograma completo, afirma. «Todos mis cuerpos tenían sensores recortados. Cuando me pasé al fotograma completo, supe que ya no habría vuelta atrás. Me gusta fotografiar en gran angular por ese estilo de documental que aporta. Es asombroso».

Su flujo de trabajo lo dictan sus clientes, que con frecuencia son promotores de eventos que desean documentar no solo el combate, sino también la preparación y las secuelas. Sus íntimas imágenes entre bastidores y su perspectiva única del combate conectan con las redes sociales y se utilizan como materiales de marketing para futuras promociones. Siguió este método durante el segundo enfrentamiento entre Manny Pacquiao y Timothy Bradley en abril de 2016 (durante la primera pelea, allá por 2012, Bradley ganó de forma muy controvertida y esta era una oportunidad de enmendar la supuesta inmoralidad de aquel combate).

«Mi encargo para este combate era hacer fotos principalmente entre bastidores, en los vestuarios», comenta. «No era necesario entregar las imágenes sobre la marcha. Hice un par de fotos entre bastidores en tiempo real antes de que comenzara el combate. Una vez en marcha, me centré en la acción, en lugar de enviar las imágenes de inmediato. Había otro fotógrafo que se encargaba de ello».

Su acuerdo con los promotores le permitió cubrir el combate y todo lo que pasó en torno a este. Luego, procesó las imágenes RAW desde la comodidad de la habitación de su hotel. Este proceso le llevó cinco horas.

Era la primera vez que Elizabeth utilizaba la EOS-1D X Mark II y, al igual que su primera salida con la EOS-1D X, le dejó huella. «Estoy emocionada por ver lo que puedo hacer con ella, especialmente con mi estilo de documental», comenta.

«Estoy deseando llevar el ajuste ISO incluso más allá y obtener imágenes de mejor calidad con ajustes ISO más altos. Me gustaría jugar con eso... Es algo muy importante para mí como fotógrafa de estilo documental».