Abrirse paso en un panorama de cumplimiento en constante cambio
El cumplimiento en el campo de la información se ha convertido en una preocupación esencial que las empresas ya no pueden permitirse ignorar. A medida que entren en vigor nuevas normativas, la gestión de la información será clave para demostrar el cumplimiento.
Los nuevos marcos normativos que se están introduciendo, como la Directiva 2 sobre seguridad de las redes y la información (NIS2) en la UE, imponen requisitos más estrictos a las empresas. Estas medidas ampliarán el alcance de la legislación existente, lo que exigirá que más sectores demuestren unos estándares de cumplimiento más elevados en un esfuerzo por abordar la persistente amenaza de la ciberdelincuencia.
Sin embargo, mantener el cumplimiento de normativas se ha vuelto más complejo que nunca. Los responsables de la toma de decisiones de TI tienen dificultades para equilibrar la seguridad de una cantidad cada vez mayor de datos con los desafíos que acompañan a la transformación digital en curso. Solo en 2023, se impusieron aproximadamente 2100 millones de euros en multas en la UE debido a infracciones del Reglamento General de Protección de Datos (RGPD)1.
A pesar de reconocer la importancia de este reto, los responsables deben hacer frente a importantes obstáculos para cumplir con sus nuevas obligaciones de cumplimiento. La adopción de medidas para mejorar la gestión de la información y la introducción de unos niveles más altos de automatización pueden respaldar la gestión del cumplimiento de normativas mediante la optimización de la gestión de documentos y datos, y la mejora de la visibilidad.