Guia Besana retrata la vida en la ciudad más al norte del mundo

La fotografía parece bastante simple: una mujer paseando a su perro en la nieve. La composición, las líneas de dirección y el color primario que contrasta con el fondo blanco son agradables. Pero si nos adentramos en la historia que hay detrás de la imagen de Guia Besana, descubrimos que lo cotidiano se vuelve extraordinario: la foto de la embajadora italiana de Canon es un poema sobre las personas, los lugares y la compleja relación entre ambos.

La obra de Guia se ha publicado en la CNN, Vanity Fair y The New York Times. Además, trabaja con diversos clientes corporativos y ha expuesto sus imágenes en todo el mundo. Generalmente divide su tiempo entre París y Barcelona, pero cuando su pareja (que también se dedica a la fotografía) aceptó un encargo a largo plazo en Noruega, decidió hacerle una visita con su hija.

En Svalbard, una cadena de islas noruegas en el océano Ártico, hay más osos polares (3000) que personas (2100). Allí está Longyearbyen, el asentamiento más al norte del mundo. Si viajas hacia el norte desde allí, lo único que encontrarás es la singular estación meteorológica. Durante la noche polar, el sol se pone a finales de octubre y no vuelve a salir hasta principios de febrero. El primer día que Guia llegó a Longyearbyen, la temperatura descendió a los -15 °C. Pero eso no detuvo a la fotógrafa para salir a realizar una serie fotográfica del fascinante asentamiento.

Guia realizó la fotografía de la mujer con una Canon EOS 5DS R, un modelo que le gusta porque es rápida y nítida, y elimina el efecto de filtro de paso bajo que puede desenfocar los detalles, especialmente en las fotografías de paisajes. Utilizó el objetivo Canon EF 24-70mm f/2.8L II USM a 33 mm «porque es el objetivo que contiene todas mis longitudes focales favoritas en una: 35-50 mm. [Con este objetivo] puedo llevar poco peso y evitar el cambio de objetivos cuando hace mal tiempo», explica. Aunque la imagen final se vea blanca, la luz del sol era tenue, así que estableció la ISO en 800, la velocidad de obturación en 1/100 segundos y la abertura en f/5.

El mayor reto al que se enfrentó Guia para realizar estas fotografías fue trabajar con las manos frías. Llevaba un par de guantes gruesos y otro par debajo, más fino y apto para trabajar con la pantalla táctil. Tenía que quitarse los guantes gruesos para poder utilizar la cámara, y debía hacerlo rápido antes de perder la sensibilidad en los dedos.

En los últimos años, se han producido condiciones meteorológicas anómalas muy probablemente debidas al calentamiento global que han causado problemas en Svalbard. Algunos científicos advierten que las avalanchas y los desprendimientos podrían hacer desaparecer Longyearbyen pronto. ¿Otorgan estos antecedentes un nuevo significado a las fotografías de Guia? ¿Son una advertencia de lo que está por venir? «Esta imagen describe de alguna manera cómo, en lugares salvajes y remotos, los animales están a cargo de su entorno», explica. También muestra cómo los seres humanos dejan que la naturaleza tome el control. «Me gusta la posición del brazo derecho y la mano de la mujer. Ese movimiento pone de relieve que se deja guiar por el perro, y de alguna manera lo acepta como guía».