¿En qué punto lo que hacemos se convierte en quienes somos? ¿Cómo sabemos, por ejemplo, cuando hemos pasado de ser «alguien que disfruta haciendo fotografías» a «un fotógrafo»? Quizás la historia del fotoperiodista nigeriano Akeem Olamide Olaosun nos ayude a comprenderlo.
Durante los últimos veinticinco años, Akeem no ha faltado a un partido de fútbol. Con su cámara réflex, una cámara más antigua que algunos de los jugadores del campo y a la que ha dado un buen uso, ha documentado cuidadosamente y con cariño los partidos de la Liga de Fútbol Profesional de Nigeria (NPFL). Semana tras semana, año tras año, mientras tantos nigerianos solo tenían ojos para los partidos internacionales, el objetivo de Akeem se ha centrado en jugadores locales, muchos de los que ahora han logrado fama y fortuna en lugares tan lejanos como la Bundesliga, la Serie A, la Premier League y La Liga.
Aunque la NPFL ha sido el alma del fútbol nigeriano desde principios de los 70 (cuando era solo la Liga Nacional de Nigeria), tampoco lo ha tenido fácil. A lo largo de los años, se ha rebautizado y reformado más de una vez, no solo para reflejar los tiempos, sino para atraer a nuevos públicos y reclamar un lugar en la escena internacional del fútbol. Por eso, las constantes imágenes de «Ola Photo Sports», como Akeem es conocido cariñosamente, han sido importantes para mantener el deporte y la liga en la conciencia pública, en sus mejores y peores momentos.
Pero esto no es solo su trabajo, y no son solo fotografías. Tampoco es simplemente un superfan con una cámara (aunque admite sin reservas que el fútbol es su vida, a veces para desgracia de su mujer). Akeem, sin pena ni gloria, se ha encontrado ocupando un espacio único en el fotoperiodismo nigeriano que representa mucho más. Su trabajo ha creado de forma silenciosa un registro fiel de más de un cuarto de siglo de historia del fútbol, con todos sus dramas, triunfos y amargos fracasos. Además de ser un cronista apasionado y paciente, se ha convertido, sin darse cuenta, en una inspiración para aquellos que han seguido sus pasos.
Tras un cuarto de siglo fotografiando equipos como Kano Pillars, Rangers International y Enyimba FC, y viajando desde estadios de Lagos a Ibadán, pasó a ser él el sujeto de otra cámara. A principios de 2024, un joven fotógrafo llamado Taofeek Ibrahim Adeshina (también conocido por su nombre online FotoNugget) publicó una instantánea de Akeem y él sentados juntos en todos sus perfiles de redes sociales. Y, aunque fue un momento encantador y sincero, en el que se mostraban dos generaciones de profesionales de la fotografía deportiva en su hábitat natural, hubo una cosa que realmente destacó para sus seguidores: la fiel réflex Canon de Akeem. Rayada y desgastada por el paso del tiempo, pero aún captando las potentes imágenes que le caracterizan.
«De alguna manera, creo que deberíamos juntarnos y renovar su cámara. La lealtad y la dedicación deben ser recompensadas», afirmó el fotógrafo David Obi, junto a cientos de otros usuarios. Y, de esta forma, Internet hizo lo que hace en sus mejores momentos: lo compartió. La avalancha de aprecio y admiración por parte de aficionados al fútbol, jugadores y profesionales de todo el país llegó en oleadas, y la mayoría quería colaborar en algún tipo de crowdfunding. Así que Taofeek lo preparó rápidamente. Sus canales, normalmente repletos de fotografías y viajes, se centraron en recaudar dinero para renovar el equipo de Akeem y crear una exposición de su obra.
Se trata de contar historias, captar emociones y mantener vivos los momentos para las generaciones futuras».
Por supuesto, la campaña no tardó mucho en llegar a nosotros e, inmediatamente, vimos la dedicación de Akeem a su profesión, su querido deporte y la comunidad que ha inspirado. Así que, en la siguiente visita de Peter Saak, Vice-President, Developing Regions, y Somesh Adukia, Managing Director de Canon Central y North Africa, a Nigeria, se reunieron con él para honrar su contribución al sector y regalarle una nueva cámara EOS R50.
Con más de un millón de visualizaciones de la publicación original en redes sociales, podemos decir con seguridad que esta historia de un veterano fotoperiodista deportivo, su desgastada cámara y su vocación por el fútbol nigeriano se ha convertido en un momento viral auténtico. Pero, ¿por qué? Aquí es donde vemos esa línea, la que se encuentra entre lo que hacemos y quienes somos. Lo que Taofeek reconoció, lo que vimos nosotros y a lo que el mundo digital respondió fue un atisbo de algo inusual: una persona que dedica su vida a una vocación por ningún otro motivo más que el amor. Akeem no ha fallado y ha seguido levantando su cámara durante más de veinticinco años. Aunque nadie lo viera ni se fijara en las imágenes que captaba, seguía haciéndolo. Esto es lo que significa ser fotógrafo. Y eso es lo que es Akeem Olamide Olaosun.
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