Marcos RodríguezEl simple hecho de poder hacer una impresión y no tener que repetirla, aunque parezca algo obvio, es una maravilla. Antes tenía que calcular demasiadas cosas y nunca salía lo que yo quería. En ese sentido soy muy exigente y me gusta que la impresión sea 100% buena.
La afición de Marcos Rodríguez por la fotografía comenzó siendo un niño, jugando con la cámara de su padre. Con el tiempo, ese juego se convertiría en su profesión y lo abocaría a una larga trayectoria que culminaría con varios galardones internacionales. Destaca la Medalla de Plata en el Mundial de Fotografía de 2015 y la “Cámara de Oro” que le otorga el título de mejor fotógrafo europeo de reportaje gráfico en los años 2017, 2018 y 2019.
Pero su primera experiencia con otra marca fue muy mala. Sin embargo, seguía necesitando una impresora de calidad que le ayudara a vender su obra, además de utilizarla para presentarse a certámenes, concursos y exposiciones. En un Congreso de la Federación Española de Fotografía, a través de Norilab, partner de Canon, conoció los detalles de las impresoras de gran formato de Canon, en concreto de la imagePROGRAF PRO-4000.
La impresora elegida, una imagePROGRAF PRO-4000. Después de muchas horas de trabajo, dejándose la piel en sus reportajes gráficos, Marcos quiere ver su trabajo reflejado en el papel con una impresión de calidad y que, por supuesto, guste al cliente.
Marcos RodríguezLo que más me gusta es que cumple con todas las funciones que me vendieron inicialmente y eso no me había pasado nunca. Y que pase eso, aunque debería ser lo habitual, ya me alegra la vida