La forma en que trabajamos ha ido cambiando rápidamente. Las empresas que se basaban totalmente en la oficina hasta hace poco exploran cada vez más otras opciones para su plantilla.
Basándonos en las conversaciones mantenidas con nuestros clientes, hemos definido cuatro tipos comunes de espacios de trabajo que están utilizando las empresas de Europa, a menudo en combinación como configuración «híbrida». Son el «espacio corporativo» (una oficina central o una sucursal), el «espacio comunitario» (como un espacio de cotrabajo compartido), el «espacio doméstico» (que designa al trabajo desde casa) y el «espacio móvil» (trabajo en cualquier parte).
Pero adaptarse al trabajo híbrido no siempre es sencillo. Dado que los equipos trabajan desde distintas ubicaciones, es fundamental que las empresas cuenten con un plan sólido para que las operaciones empresariales sigan siendo seguras y eficaces.
En el siguiente artículo, detallamos cinco consejos que ayudarán a cualquier empresa que desee adoptar el trabajo híbrido a hacerlo bien desde el principio.